Con la nueva normalidad patrocinada por el tan famoso COVID-19, ha causado una serie de cambios extremos en el mundo de la aviación. Las primeras y más afectadas han sido aerolíneas que cuentan con vuelos transoceánicos a diferentes países y continentes. Esto también fue lo que propicio que la epidemia se convirtiera en una pandemia.
Si bien no podemos hacer nada al respecto más que adaptarnos, algunas aerolíneas han tomado medidas un tanto extremas para el control de sus tripulaciones. Respaldando sus argumentos con que todo se hace por su salud y seguridad. Uno de los ejemplos más llamativos fue la "sugerencia" del gobierno chino para que los tripulantes usaran pañal y así evitar que usaran el baño.
Hoy tenemos la noticia de que Singapore Airlines (SIA) require a sus tripulantes usar un dispositivo de rastreo cuando pernocten fuera de base, esto para asegurarse que cumplen con la regla de no interactuar con nadie y quedarse en sus cuartos de hotel. Todo para minimizar el riesgo de contagio entre tripulaciones y pasajeros.
"Seguimos guiados por las autoridades y trabajamos de manera cercana con ellos para realizar los ajustes pertinentes, de ser necesario, para asegurar la salud y seguridad de nuestros empleados y clientes durante nuestros vuelos." comentó SIA.
Además de tomar medidas sanitarias como la toma de temperatura antes de el inicio de su jornada laboral, un llenado de formulario de declaración de salud y si hay riesgo de no sentirse bien, motivan a que no se presenten a trabajar. Al igual que en muchas aerolíneas, se requiere de la sana distancia, del uso de lentes protectores, guantes y una bata de servicio especial (desechable).
A la llegada a base (SIN) requieren ir inmediatamente a casa y aislarse hasta saber el resultado de su prueba. Muchos tripulantes están de acuerdo con las medidas tomadas, otros más piensan que se va más allá del espacio y vida personal.
¿Crees que debería ser necesario esto? ¿O se debería simplemente confiar en los empleados?